Días 23 – 27 OCTUBRE

Lunes 23 de octubre

Empezamos nuestra oración dando gracias por un nuevo día, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo

ESCUCHAMOS LA PALABRA 

Vamos a conocer el Evangelio de hoy con esta canción: San Lc 12,13-21

REFLEXIONEMOS

Cita célebre para reflexionar durante un minuto: 

«La avaricia lo pierde todo por quererlo todo» Jean de la Fontaine

Martes 24 de octubre

Nos damos los buenos días rezando, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

REZAMOS JUNTOS 

Permíteme que escuche a cuantos me rodean. 
No dejes que me resista a la verdad.
Que mis ojos se abran, y también mi corazón.
No permitas que la terquedad haga su nido en mi interior.
Libérame de todo cuanto pueda hundirme en la ignorancia.
Ayúdame a oír tu voz, Señor,  y no dejes que me deje llevar por la obstinación. 
Ayúdame a utilizar palabras y actitudes de amor y de júbilo; 
a abrir mi corazón a todo lo bello, pues la belleza también es sabiduría.
Permíteme escuchar con el corazón y con la mente, tener paciencia  para esperar y reconocer el pensamiento sabio cuando llegue.
Nunca me abandones en medio de la oscuridad del que no quiere ver,  porque tú eres el mensajero de la luz.

Miércoles 25 de octubre

Comenzamos nuestra oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

REZAMOS JUNTOS 

Señor,
en el silencio de este día que comienza,
vengo a pedirte paz,
prudencia y fuerza.

Hoy quiero mirar el mundo
con ojos llenos de amor,
ser paciente, comprensivo,
dulce y prudente.

Ver por encima de las apariencias,
a tus hijos como Tú mismo los ves,
y así no ver más que el bien
en cada uno de ellos.

Cierra mis oídos a toda falsedad,
guarda mi lengua de toda maldad,
que sólo los pensamientos caritativos
permanezcan en mi espíritu,
que sea benévolo y alegre,
que todos los que se acerquen a mí
sientan su presencia.

Revísteme de Ti, Señor,
y que a lo largo de este día yo te irradie

Jueves 26 de octubre

Comenzamos el día de hoy poniéndonos en presencia del Señor. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

REFLEXIONAMOS

Muchas veces parece que Dios se nos oculta y que las muchas ocupaciones o tareas que tenemos, las diversiones o los problemas hacen que nos olvidemos… 

Sin embargo, Él siempre está con nosotros, está en nosotros. 

Escuchamos esta canción y reflexionamos sobre todos esos pequeños detalles, esos momentos en los que Dios se nos hace presente.

A los Sagrados Corazones de Jesús y de María
Honor y Gloria

Viernes 27 de octubre

La Palabra de San Pablo nos recuerda que «Tened los mismos sentimientos de Jesús». Deseamos tener un corazón como el de Jesús bueno, compasivo y generoso con todos. Vamos a rezar esta oración para que nuestro corazón se moldee al modo de Jesús.

 

Danos tu corazón

Que el Señor nos acompañe al partir de este lugar.
Que vaya delante de nosotros para iluminar el camino.
Que camine a nuestro lado para ser siempre nuestro amigo.
Que vaya detrás de nosotros para protegernos de cualquier daño.
Que sus brazos cariñosos estén debajo de nosotros para sostenernos
cuando el camino sea duro y estemos cansados.
Que esté con nosotros para cuidar a todos los que amamos.
Que viva en nuestro corazón para darnos su alegría y su paz.

Padre bueno:

Danos un corazón de POBRE; capaz de amar, para abrirse y entregarse.
Danos un corazón PACIENTE; capaz de amar, viviendo esperanzados.
Danos un corazón PACIFICO; capaz de amar, sembrando la paz en el mundo.
Danos un corazón JUSTO; capaz de amar la justicia.
Danos un corazón MISERICORDIOSO; capaz de amar, comprendiendo y perdonando.
Danos un corazón SENSIBLE; capaz de amar, llorando sin desalientos.
Danos un corazón PURO; capaz de amar, descubriendo a Dios en el ser humano.
Danos un corazón FUERTE; capaz de amar, siendo fiel hasta la muerte.

Danos tu corazón

Lunes 30 de octubre

Empezamos nuestro día en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. 

ESCUCHAMOS LA PALABRA

Lc (13, 10-13)

Un sábado, enseñaba Jesús en una sinagoga. Había una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y estaba encorvada, sin poderse enderezar de ningún modo.
Al verla, Jesús la llamó y le dijo: «Mujer, quedas libre de tu enfermedad».
Le impuso las manos, y enseguida se puso derecha. Y glorificaba a Dios.

ESCUCHAMOS LA CANCIÓN

Escuchamos esta canción que nos ayuda a entender esta Palabra, Dios quiere que seamos en plenitud.